Ligero y casual llegaste
entre fichas y recuadros
me invitaste a unos cafés
y fuimos voz entre los ojos.
En las manos tu ausencia
fueron amistad tus historias
entre cantos gregorianos
de pingüinos me hablaste.
Tus ojos de miel vertieron
la confianza en tus abrazos
tus sueños también
fueron cintura en tu palabra.
Mi risa envolvió tu rostro
substrajimos la tristeza
se sumaron mil alegrías
fue noche de crispetas.
Nos llenamos de consejos
entre las brisas del aire
en los brazos de los vientos
se hizo tiempo el abrazo.
Se zanjó la nostalgia
nos sanaron los versos
las palabras el recuerdo
y la empatía fue fuente.
Así llegaste a mi vida
ligero y casual un día
entre fichas y recuadros
entre cafés y consejos.
Laura Gil
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Muchas gracias por tu tiempo, saludos cordiales.