jueves, 16 de octubre de 2014

PENUMBRA BIFIDA





En el oscurecer pardo de la estepa
desde la penumbra bífida del antro
se rasga la clemencia con la lanza 
y se hunde en el follaje de la esencia.

Los aljófares oxidan los silencios
en el soberbio extremo de la jungla
con el agreste que desata la ponzoña
en las bajezas del infierno saturado.

Se acuñan bastones sin mesura
con la pira del averno con veneno
que enciende las hieles perniciosas
sobre las aguas de la ciénaga ojeriza.

Concurre la sombra de reptiles, 
en la noche claroscuro del follaje
en los hocicos con lodo y toxina
que sueltan el virus en la cumbre.

En el ruido que engulle la soberbia
se asienta el ocelote en el ramaje
y con la crudeza de su instinto
asalta a la gacela con su cría.

Arde la floresta que enreda los dolores
se atropella el vocablo, agoniza la oda
y se alza la mirada hacia los cielos
que, pide indulgencia en el silencio.

Laura Gil

2 comentarios:

Muchas gracias por tu tiempo, saludos cordiales.