Menguó el tiempo cuando agonizó el día
apeada al olvido deliberé en sucumbir
junto a mí se hicieron trizas las horas
apeada al olvido deliberé en sucumbir
junto a mí se hicieron trizas las horas
en la ánfora de las manos silenciosas.
Te vi alejarte de mi vida poco a poco
ante mis ojos se congeló la noche
ante mis ojos se congeló la noche
llegó la sombra en un manto de silencio
que estampó broches a los sueños.
Terminaron en el surgir de un segundo
las palabras de amor que naufragaron
en el mar del olvido y la penumbra,
en el mar del olvido y la penumbra,
fue historia sepultada en la sombra.
Laura Gil
Bellamente doloroso!!!
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